Es la expresión más sofisticada y exquisita de tan legendaria casa. Destaca por su vinosidad, por su carácter, por su complejidad, cualidades que compagina con un marcado frescor. Brinda aromas cítricos, a manzana y a confituras, quizás de albaricoque, quizás de melocotón, muy gratos, un tanto seductores, sin que falte la presencia de frutos secos y notas tostadas. En boca reproduce la sensación agridulce que distingue su nariz, con acidez y madurez, no sólo de la fruta sino también de una larga crianza en bodega, que incita a seguir bebiendo pese a su indudable fuerza y complejidad.
Elaborado con un 64 % de pinot noir y 36% de chardonnay, uvas procedentes de exclusivamente de 8 Grands Crus. Su crianza dura 6 años.