Un queso de autor auspiciado por el acuerdo de una bodega de la zona, Comenge, con la quesería Cantagrullas. ¿De autor o una osadía? Quizás las dos cosas, pues hay que ser valiente y hasta temerario al forrar un queso de oveja castellana de leche cruda y pasta blanda con los hollejos después de haberlo pintarlo con las lías del mosto, saliendo al mercado con dos semanas de afinamiento. En boca depara unos contrastes táctiles ciertamente expresivos y hasta extremos: a la cremosidad evanescente de la leche le suceden el crujiente de las pepitas y la aspereza de las pieles de las uvas. Más que perfecto, sorprendente. Por el paladar se suceden sensaciones sustanciosas y frescas: leche de oveja y una sutil acidez, con notas amargas. Muy distinto. En un principio están previstas 400 unidades de este queso al año, que se iran ajustando a la demanda.
Tambien fabrican otro más curado en piezas de 1,5 kilos.
Ambos se puede adquirir en la tienda que tienes en Peñafiel. Bodegas Comenge Enoturismo. Está situada en la Plaza de España, 15.