Rafa Soler, a sus veintisies años, regenta desde 2006 este antiguo restaurante italiano al que dedicaron muchos años sus padres. En este tiempo ha ido evolucionando sin prisa pero sin pausa hacia una alta cocina moderna posibilista. Consciente de su juventud, consciente de los medios técnicos y equipo de los que dispone, consciente de la limitación de precio que se marca, consciente de tantas cosas, este inteligente y sencillo, en verdad que sencillo chef, se plantea ir alcanzando pequeñas metas que le permitan a largo plazo estructurar una gran casa.