Bajo esta etiqueta tan prestigiosa empresa de aceites jienenses comercializa un coupage de picual, manzanilla y arbequina. Destaca por su enorme afrutado, al que sigue una sensación olfativa un tanto aceitosa, deparando mucha complejidad. En boca se ratifican esos caracteres, a las que hay que añadir los específicos de la variedad preponderante, la picual, que manifiesta su amargor y picante, sabores que parecen muy atemperados, lo que significa un apreciable refinamiento de su idiosincrasia rústica. Llama la atención a su vez el cuerpo y persistencia que luce.
Esta misma casa comercializa Hacienda La Laguna de Jaén Arbequina que merece un 9,25.
Cuatro características marcan la diferencia en los chocolates de Pierre Hermé, un profesional fuera de serie. En primer lugar la nobleza de las materias primas que trabaja. En segundo término, las técnicas que emplea para sacar el mayor partido posible al cacao. Un...
